Renaciendo de mis cenizas...



Creo que ya ha llegado la hora de poner un punto y final a algunos aspectos de mi vida que aunque tenía aislados, no los tenía olvidados... Como había comentado en anteriores actualizaciones, mi vida a comenzado con una segunda temporada, y no podía seguir adelante con esta nueva etapa si seguía manteniendo los marcadores como estaban cuando lo dejé con Pablo... Así pues, estamos otra vez frente a un empate a cero que espero que empiece a moverse pronto.

Pero mientras tanto...
Hoy he conocido a Edu, como baticiné ayer, y la primera impresión no ha sido solo buena, sino que ha sido genial... Me ha dado "muy buena vibra" durante todo el día. Hemos ido a dar una vuelta a un centro comercial de las afueras, y nada, lo típico cuando conoces a una persona con la que conectas: conversaciones fluidas a diestro y siniestro (que no monólogos), muchas cosas que compartir, muchos temas de los que hablar y sobre todo muchas risas, o al menos, yo por mi parte, me he reido mucho y he disfrutado del día de hoy al máximo. Me habría gustado haberle conocido antes, cuando me encontraba en otras circunstancias y no ahora (me refiero al próximo párrafo). Pero lo que sí tengo claro es que ambos hemos ido buscando un objetivo común: pasar un buen rato y conocernos, que ya teníamos ganas.
"Adiós Dulcinea, adiós"... No sé si debería darme por aludido... No lo hice desde un principio, pero terceras personas me han dicho que lo haga. Así pues, la respuesta es la misma: "¡Adiós!". Aunque me haya dejado algo marcado, (todo hay que decirlo), no voy a permitir que interfiera en las futuras relaciones que pueda tener. De hecho, tengo incluso ganas de decirle algunas cosas que, si la ocasión lo requiere, se las diré. Pero siempre y cuando se me "ataque" personalmente, no en un blog o yo haré lo propio...
En cuanto a Edu, solo decirle que espero que esta haya sido la primera de muchas más escapaditas por Málaga... Que espero que nos pidan un euro en el "parking" más veces... Que discutamos sobre Gran Hermano, películas y libros... Que hablemos del instituto como si fueramos compañeros... Que compartamos recuerdos de nuestros colegas, amigos y profesores... Que debatamos acerca de los presocráticos y de los comentarios de texto... Pero sobre todo, que pasemos muchos más momentos agradables como los que hemos pasado hoy. Gracias por la tarde, las risas y ¡los "diablillos nergos"!
El finde que viene se presenta prometedor también. De entrada ya tengo planes con Damián para salir con él por Granada el Viernes por la noche. Así que de momento la cosa pinta bien! No se me antoja deliciosa la idea de ver rostros del pasado por ahí, pero bueno, haré un sacrificio... En cuanto a Damián, tengo millones de ganas de verle, porque ya llevo más de un mes sin poder darle un abrazo y ya me hace falta un poco de calor de amigos... Aunque hoy Edu también me lo ha dado...
En fin... Como conclusión solo decir que estas rayadas momentaneas que me han ido asolando estos últimos días empiezan a desvanecerse y la felicidad cada vez es más palpable. Hasta el viernes que viene, seguirá ahí... Ya veremos después...